Las Neoplasias Hemáticas y Los Afroamericanos: No se Trata Solo de Genética

Las preguntas han atormentado a médicos y científicos durante mucho tiempo: ¿Por qué algunas neoplasias hemáticas son más frecuentes entre los afroamericanos? ¿Se debe a la genética o el ambiente? ¿Por qué las respuestas a los tratamientos suelen ser peores en este grupo, incluso cuando reciben el mismo tratamiento que otros pacientes?
“Es un panorama muy complicado y no hay una respuesta simple”, explica Namrata Chandhok, M.D., hematóloga y oncóloga de Sylvester Comprehensive Cancer Center, parte de University of Miami Health System. “Las características biológicas son solo un factor clave, pero hay otros aspectos importantes, como la conducta saludable y las barreras estructurales a la atención, que también entran en juego”.
No obstante, la Dra. Chandhok se apresura a señalar que “cada estudio, cada artículo nos acerca a una mejor comprensión”.
Los estudios recientes aclaran las disparidades
Un estudioxplica por qué un subtipo de neoplasia hemática, la leucemia mielógena aguda, resulta más mortal entre los pacientes de raza negra, incluso cuando reciben el mismo tratamiento que los de raza blanca. Otro estudio, publicado en la revista Blood el año pasado, revela que el tratamiento de vanguardia para el mieloma múltiple da lugar a tasas de supervivencia iguales o superiores para los afroamericanos que padecen esta neoplasia hemática común. Aunque parezcan contradictorios, estos estudios en realidad no lo son.
La Sociedad Estadounidense de Hematología señala que existen disparidades raciales/étnicas “significativas” en la incidencia y la supervivencia de pacientes con neoplasias hematológicas Esto también es cierto para la mayoría de los tumores sólidos, según la Sociedad Americana contra el Cáncer.
Apenas comenzamos a entender por qué. Un equipo de investigación examinó las historias clínicas de más de 800 personas diagnosticadas con leucemia mielógena aguda en Chicago ydescubrió que aquellos que vivían en barrios más empobrecidos tenían un mayor riesgo de morir a causa de esa enfermedad. Entre los de raza negra, el riesgo fue un 48 % mayor; entre los hispanos, un 20 %. Los datos sobre pacientes más jóvenes con leucemia mielógena aguda mostraron una disparidad similar: los pacientes jóvenes de raza negra tenían un 27 % más de riesgo de morir que los de raza blanca.
Esto no sorprende a la Dra. Chandhok. “Tenemos un problema sistémico”, afirma. “A menudo, se trata de tener menos acceso a la atención médica y de no recibir un diagnóstico correcto o a tiempo”.
Las características biológicas todavía juegan un papel
Sin embargo, los factores geográficos y relacionados con el estilo de vida no son los únicos responsables, añade la Dra. Chandhok. Muchos tipos de cáncer son causados por una interacción complicada entre el entorno y las características biológicas algo que también se confirma en el estudio sobre leucemia mielógena aguda. Al analizar los datos de 10 años de pacientes con leucemia mielógena aguda, en este estudio se mostró que las mutaciones consideradas de “buen riesgo”, que generalmente se asocian con una mayor probabilidad de supervivencia o curación, no mejoraron la respuesta de los pacientes de raza negra tanto como la de los de raza blanca. Esto apunta al papel de las diferencias genéticas en pacientes de distintos orígenes raciales.
A esta situación se suma el hecho de que los afroamericanos “están infrarrepresentados en los ensayos clínicos que dan lugar a nuevos tratamientos”, afirma la Dra. Chandhok. Por lo tanto, “todos los datos, desde la cantidad de dosis correcta hasta cómo reaccionará un grupo racial o étnico a determinados tratamientos, son menos representativos de los pacientes de raza negra que de los de raza blanca”.
La parte oculta del mieloma múltiple
Los afroamericanos representan aproximadamente el 20 % de los casos de mieloma múltiple. Sin embargo, su tasa de supervivencia también es menos prometedora, ya que tienen menos probabilidades de someterse a trasplantes de células madre, que es el tratamiento estándar para la mayoría de los pacientes.
Sin embargo, cuando reciben el tratamiento adecuado, como muestran los datos del Departamento de Asuntos de los Veteranos publicados en la revista Blood, las diferencias en las respuestas desaparecen.
La Dra. Chandhok cree que una vigilancia adecuada, un mejor acceso a la atención médica y la exploración de una mejor representación de las poblaciones minoritarias en los ensayos clínicos contribuirán a mejorar las respuestas a las neoplasias hemáticas entre los diferentes grupos raciales.
Afirma que a muchos de sus pacientesson derivados por médicos de atención primaria que detectan problemas durante los análisis de sangre, lo que subraya la importancia del cuidado de rutina. Los exámenes físicos y las consultas periódicas pueden ayudar a detectar una neoplasia hemática antes de que los pacientes presenten síntomas como cansancio, inflamación de los ganglios, cambios en la piel, fiebre y pérdida de peso..
“Conozca su cuerpo”, dice la Dra. “Conozca sus antecedentes familiares. Disponer de una buena información (a través de consultas de rutina y análisis de sangre) y un seguimiento adecuado puede ser de gran ayuda”.
*Contenido médico revisado por Namrata Chandhok, M.D. en diciembre de 2022.

Ana Veciana-Suarez es colaboradora habitual de University of Miami Health System. Es autora y periodista reconocida que trabajó en The Miami Herald, The Miami News y The Palm Beach Post. Visite su sitio web en anavecianasuarez.com o sígala en Twitter: @AnaVeciana.
Publicado originalmente el: 19 de febrero de 2021
Publicado originalmente en: octubre 04, 2024
Tags: disparidad en salud, Dra. Namrata Chandhok, neoplacia hemática