Nuevos tratamientos contra el TDAH: ¿funcionan?

El trastorno por déficit de atención con hiperactividad (TDAH) es una enfermedad frecuente que afecta,como mínimo, al 5 % de los niños. Este trastorno del neurodesarrollo suele ser un problema para los padres, pone a prueba la paciencia de los profesores y causa problemas de autoestima en niños y adolescentes.

Los síntomas pueden ser perturbadores y difíciles de ignorar:

• comportamientos impulsivos;
• comportamiento demasiado activo;
• dificultad para llevarse bien con los demás;
• problemas para prestar atención.

Se diagnostica el trastorno a más niños que niñas, pero las niñas también pueden mostrar signos diferentes: más distracción y ensoñación, pero menos inquietud y retorcimiento, por ejemplo.

Independientemente del sexo, los adolescentes con TDAH no lo superan, y las consecuencias de un trastorno no tratado pueden afectarlos de por vida.

Los adultos con síntomas de TDAH siguen luchando con el autocontrol y la concentración, habilidades vitales que son importantes para tener éxito en el mundo.

“Cambia con el tiempo, pero no desaparece”, afirma Alan Delamater, Ph.D., psicólogo pediátrico del University of Miami Health System. “El adulto suele aprender [lo que es un comportamiento inadecuado], pero la inquietud subyacente permanece”  

Si bien no hay cura, hay formas de mejorar o aliviar los síntomas. Ahora, hay muchos más tratamientos (cuatro de ellos aprobados en los últimos tres años) a los que pueden recurrir los psicólogos, médicos y padres.

No obstante, antes de explorar estas posibilidades, el Dr. Delamater sugiere a los padres que se aseguren de que el niño tiene el diagnóstico correcto.

No todos los niños inquietos tienen TDAH.

 “Hay muchos diagnósticos erróneos”, explica. “Hay muchos niños que son inquietos, pero son los niños cuyo comportamiento causa un deterioro los que podrían tener TDAH”.

Para determinar si el niño padece o no el trastorno, es necesario realizar “una evaluación exhaustiva” que incluya los antecedentes médicos y de desarrollo detallados, entrevistas clínicas, pruebas psicológicas, pruebas de audición y visión, exploraciones físicas y una escala de valoración del comportamiento rellenada por los padres y los profesores.

“No tenemos una sola prueba mágica para usar”, agrega el Dr. Delamater. “Es un proceso de varios pasos”.

Esto ayuda a los proveedores de atención médica a distinguir entre el TDAH y otros trastornos neurológicos que pueden tener síntomas similares.

Por lo general, los niños y adolescentes con TDAH reciben tratamiento con terapias cognitivas y conductuales, adaptaciones especiales en el aula y medicamentos estimulantes. Los padres también suelen recibir asesoramiento y formación para el control del comportamiento.

Ahora, cuatro tratamientos contra el TDAH aprobados por la Administración de Alimentos y Medicamentos (Food and Drug Administration, FDA) pretenden aumentar o sustituir los tratamientos que se han utilizado durante años.

Pero, ¿funcionan?

Le presentamos un resumen de las más recientes incorporaciones a la caja de herramientas del TDAH:

EndeavorRx es un videojuego, el primer tratamiento terapéutico contra el TDAH basado en juegos aprobado por la FDA.

Está pensado para niños de 8 a 12 años y solo para determinados tipos de TDAH. Se necesita una receta para comprarlo, pero ha acaparado mucha atención de los medios de comunicación porque hace que el tratamiento sea divertido y accesible. En un estudio publicado en Lancet Digital Health, se demostró que mejoraba la falta de atención en pacientes con TDAH de tipo inatento o combinado.

Sin embargo, esto no significa que el videojuego sea todo juego. EndeavorRx es solo una parte de un programa terapéutico más amplio que también puede requerir medicamentos.

El Dr. Delamater acoge el concepto. Le gusta que ofrezca una alternativa a los medicamentos, que pueden afectar de manera negativa la salud del niño. “Es un entrenamiento de la atención mediante el uso de algo que atrae a los niños, como ir a un gimnasio mental”.

Sin embargo, señala que solo se trata de un estudio y que los resultados positivos comunicados no se trasladaron al aula. Por ahora, “diría que es prometedor, pero necesitamos más datos”, agrega. 

El sistema de estimulación externa del nervio trigémino (External Trigeminal Nerve Stimulation, eTNS), aprobado por la FDA en 2019, suministra estimulación eléctrica de bajo nivel al cerebro.

Con la supervisión de un cuidador, se colocan electrodos en la frente mientras el niño duerme. En un ensayo clínico publicado en el Journal of the American Academy of Child & Adolescent Psychiatry, se ha demostrado que la eTNS reduce los síntomas del TDAH.

Sin embargo, al igual que el estudio del videojuego, solo se trata de un estudio, y participaron relativamente pocos niños. Más del 50 % de los niños también tuvieron dolores de cabeza, cansancio y aumento del apetito.

El Dr. Delamater no conoce a ningún colega que utilice el dispositivo TNS. “En este momento”, agregó, “no hay suficientes datos” para recomendarlo.

Se agregaron dos nuevos medicamentos al arsenal de tratamientos contra el TDAH en 2021.

Se trata de Azstarys, un medicamento estimulante, y Qelbree, un medicamento no estimulante, para niños de seis años en adelante. Los protocolos de tratamiento actuales ya incluyen medicamentos, en general, un estimulante del sistema nervioso central. Los más conocidos son Ritalin y Adderall. Sin embargo, si bien se ha demostrado que el tratamiento con medicamentos para niños con TDAH es eficaz, ha sido objeto de controversia durante años, por lo que algunos padres temen que, a veces, se receten medicamentos de más a los niños.

Los nuevos medicamentos aprobados pueden echar más leña al fuego de este debate, pero también ofrecen otra opción para los niños que toman medicamentos. (Al menos dos tercios, y hasta el 75 %, de los niños con TDAH toman medicamentos recetados). El Dr. Delamater sugiere a los cuidadores que hablen con el pediatra sobre el cambio o la sustitución de los medicamentos más antiguos.

Estos pueden brindar una alternativa para quienes no responden bien [a los medicamentos actuales] o tienen problemas con los efectos secundarios. Pero no son una píldora mágica.

Dr. Delamater

Independientemente de los nuevos tratamientos, agrega, “el control del TDAH sigue requiriendo un tratamiento multimodal. Seguimos necesitando varios enfoques terapéuticos juntos, no solo uno”.

Ana Veciana-Suarez, columnista invitada

Ana es colaboradora habitual de University of Miami Health System. Es una autora y periodista reconocida, que trabajó en The Miami Herald, The Miami News y The Palm Beach Post. Visite su sitio web en anavecianasuarez.com o sígala en Twitter: @AnaVeciana.

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