¿Qué Sujetador Debo Usar Después De Una Cirugía De Mama?

Incluso si solo has tenido una lumpectomía menor, tu pecho sigue cambiando después de la cirugía de cáncer de mama, lo que hace que la selección de un sujetador ideal, sea sea difícil.

¿Alguna vez has llevado un sujetador de repuesto en tu bolso, sabiendo que el que uses podría volverse incómodo en cualquier momento del día? Yo lo he hecho. Incluso ahora, casi un año después de mi lumpectomía por cáncer de mama en etapa 1A, aún a veces meto un sujetador de repuesto en mi bolso si voy a estar fuera todo el día. Aunque no he necesitado cambiarlo a mediodía en meses, el impulso de llevarlo sigue allí.

Las mujeres que han tenido mastectomías y reconstrucción han pasado por una cirugía mayor y pueden enfrentar dificultades para encontrar ropa interior adecuada para sus cuerpos cambiantes. Si eres una de ellas, te recomiendo hablar con tu navegante de cáncer de mama o con el trabajador social de tu centro de oncología. Existen varios programas que pueden ayudarte a obtener los sujetadores especializados que necesitas, muchas veces sin costo alguno.

Yo solo tuve una lumpectomía lo suficientemente pequeña como para no necesitar reconstrucción, ni siquiera un levantamiento de mama en el otro lado para equilibrar mi pecho. La cirugía fue seguida de radioterapia. En las primeras semanas, me indicaron usar un sujetador de compresión. Después, me recomendaron no usar nada con varilla en el futuro cercano. Esto se debe a que la cirugía puede causar entumecimiento. Un alambre que corte o irrite las cicatrices podría no sentirse, lo que podría causar una infección.

Comodidad, estilo y funcionalidad

La comodidad es importante, sí, pero también quiero que mi sosten no se vea debajo de la ropa, que no empuje bultos de grasa en lugares poco atractivos ni haga que mis senos se vean caídos. Y, siendo honesta, quiero que esta prenda clave sea un complemento para mi apariencia general. Quiero sentirme bien conmigo misma, porque la autoestima juega un papel importante en la supervivencia al cáncer.

En los meses desde mi cirugía, he comprado al menos una docena de sujetadores diferentes. He devuelto muchos de ellos, he conservado algunos y he dado algunos después de descubrir que solo eran cómodos por una o dos horas. Especialmente durante los primeros seis meses después de la cirugía, nunca sabía cuál sería cómodo, y algunos días cambiaba mi sosten hasta tres veces (lo que resultaba en un día de cuatro sujetadores).

Ya no soy una chica de varilla

Antes de la cirugía, yo era una chica de varilla. Después de la cirugía y la radioterapia, ya que no se permitían sujetadores con varilla, tuve que comprar todo un nuevo guardarropa de sujetadores. Era un guardarropa cambiante también, ya que los sujetadores que eran cómodos poco después de la cirugía se volvieron incómodos durante la radioterapia o no ofrecían suficiente soporte cuando la hinchazón bajó.

Les pregunté a otras sobrevivientes qué sujetadores les gustaban. La mayoría dijo que nada era cómodo. Una sobreviviente, que en realidad tiene una tienda de sujetadores, me pidió que le dijera lo que encontraba porque ella aún tenía problemas con los sujetadores. Unas pocas mujeres me recomendaron marcas que les habían gustado o una boutique en línea que les había sido útil. Hubo mucha prueba y error. Principalmente error.

Las vacaciones de los nueve sujetadores en cinco días

Esto me lleva al viaje de cinco días en el que llevé nueve sujetadores.

Habían pasado casi seis meses desde mi lumpectomía y cuatro meses desde que terminé la radioterapia. Mis heridas de la cirugía ya estaban completamente curadas, y mi piel solo mantenía un poco de sensibilidad post-radioterapia. Todavía sentía algo de dolor en la zona donde me habían extraído 14 ganglios linfáticos centinela debajo del brazo. Día a día, nunca sabía qué sujetador sería cómodo o si un sujetador que era cómodo cuando me lo ponía por la mañana se volvería doloroso en pocas horas o a mitad del día (de ahí el sujetador de repuesto).

Así que, mientras hacía la maleta para unas vacaciones que incluirían asistir a una boda y a una fiesta de cócteles, mi pila de sujetadores era grande. En el avión, usaría un sujetador de compresión alta con cierre frontal que combinaría bien con mi manga de compresión para reducir el riesgo de linfedema. Su alta compresión significaba que querría cambiarme poco después de aterrizar.

Llevaba un sujetador para caminar por la ciudad y hacer yoga. Además, empaqué sujetadores que se veían bien bajo la ropa, aunque a veces se clavaban en mi piel. También incluí un bralette suave para dormir, ya que algunos movimientos todavía causaban incomodidad. Por otro lado, metí un sujetador minimalista de copa triangular, ideal para los días en que la zona de los ganglios linfáticos estaba irritada. A pesar de que el bralette de encaje era rasposo, a veces era sorprendentemente el más cómodo. Finalmente, guardé un bralette que siempre era cómodo durante todo el día, aunque no muy favorecedor.

Usé seis de los nueve sujetadores durante mi viaje de cinco días.

La búsqueda continúa

Realmente no he encontrado un sujetador «ideal», aunque he encontrado algunos que son buenos la mayoría de los días. Sigo probando nuevos. Mi cirujano me dio recientemente el visto bueno para intentar usar sujetadores con varilla nuevamente. Sin embargo, mi forma y mis sensibilidades han cambiado; incluso con mi pequeña lumpectomía, muchos de mis sujetadores «pre-cirugía» simplemente ya no sirven. La búsqueda, lamentablemente, continúa.

P.D. Prueba muchos sujetadores para encontrar los que funcionen para ti. Además, tu talla puede haber cambiado o seguir cambiando, incluso con una cirugía menor, así que prepárate para experimentar con las tallas.

7 Consejos para la Ropa Interior Después de la Cirugía de Mama

• Habla con el navegante de cáncer de mama o el trabajador social de tu centro de cáncer para los programas de sujetadores.
• Elige un sujetador de compresión con cierre frontal por conveniencia y para los viajes en avión, para reducir el riesgo de desarrollar linfedema.
• Lleva un sujetador de repuesto en tu bolso para los días con potencial de incomodidad. En Florida, hay consideraciones adicionales respecto al calor y la humedad.
• La cirugía de mama puede causar hinchazón, así que no tengas miedo de probar muchos sujetadores, incluso aquellos fuera de tu talla habitual, para encontrar el que funcione para tu forma cambiante.
• Elige un bralette suave para dormir y reducir el dolor por el exceso de movimiento.
• Considera la forma y textura del sujetador para evitar áreas sensibles como la cirugía de ganglios linfáticos o la sensibilidad por radioterapia.
• Pregunta a otras sobrevivientes qué les funciona.

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