Vitalidad

VT

Oigan, Adultos: no Coman como si Fueran Niños

5 min read  |  marzo 14, 2019  | 
Available in English |

A medida que uno envejece, el cuerpo cambia; atrás quedaron los días en los que uno podía comer todo lo que quisiera y no aumentar ni un gramo. Todas las personas, cuando tienen alrededor de 45 años, son muy conscientes de que ya no tienen 14. Por lo tanto, tiene sentido que también cambie su alimentación.

“Esto no significa solo comer menos a medida que uno envejece para no subir de peso, para no engordar”, dice Sheah Rarback, experta en nutrición y dietista certificada del University of Miami Health System. “Si bien es cierto que una persona de mediana edad necesita menos calorías que un adolescente, siempre es necesario seguir una dieta rica en nutrientes”.

Entonces, en lugar de preocuparse por hacer dieta durante toda su vida, enfóquese en lo que come para poder mantenerse saludable y fuerte independientemente de su edad.

Infancia

Los buenos hábitos alimentarios comienzan en la infancia.

Los padres son fundamentales para sentar las bases para que su hijo se convierta en un adulto responsable que consuma verduras. “Si una persona creció comiendo arroz blanco y alimentos salados, puede ser difícil renunciar a eso”, dice Rarback. “La infancia es el momento perfecto para que los alimentos nutritivos formen parte de la mesa familiar y para involucrar a sus hijos en la cocina”.

Los años de la adolescencia

También conocidos como los años de los “ataques al refrigerador”.

Para crecer, se consumen muchas calorías; por eso, la necesidad de calorías de su hijo también aumenta, lo cual explica por qué los adolescentes, especialmente los varones, tienen la reputación de tener hambre todo el tiempo.

“Si su adolescente ataca la cocina y encuentra un montón de galletas y papas fritas, eso será lo que comerá”, dice Rarback. “Además, los adolescentes necesitan más hierro que los niños más pequeños, ya que las jóvenes comienzan con sus ciclos menstruales y los jóvenes desarrollan más músculo”.

Rarback, que también brinda asesoramiento por video sobre nutrición a niños en escuelas, sugiere que los padres se aseguren de mantener sus refrigeradores repletos de alimentos saludables, como frutas y carne con bajo contenido de sodio para el almuerzo.

Entre los 20 y los 40 y tantos

Hola adultez. Adiós a las pizzas a las 11.00 p.m.

Si todavía no aprendió a cocinar, ha llegado el momento. Cocinar en casa tiene un gran impacto en su salud. Durante esta etapa de su vida, debe comenzar a hacerse responsable realmente de su propio consumo de alimentos saludables. “Este es el momento de hacer cambios en la alimentación para protegerse de enfermedades crónicas, como enfermedades cardíacas o diabetes, y no a los 60 años, cuando podría ser demasiado tarde”, señala.

Las mujeres que se estén preparando para un embarazo deben asegurarse de incorporar abundante ácido fólico en su alimentación.

Menopausia

ESE momento nos llega a todas, señoras.

Alrededor de los 55 años, las mujeres tienden a aumentar de peso debido a la falta de estrógeno. Según Rarback, las mujeres a esta edad necesitan 200 calorías menos para mantener su peso. “En este momento de su vida, no es recomendable consumir alimentos con un alto contenido de azúcar y con muchas calorías vacías”, dice. Pero es muy importante que no deje de ingerir alimentos nutritivos por su interés en reducir el consumo de calorías.

También sugiere comenzar entrenamiento de fuerza para fortalecer los músculos, porque los músculos utilizan más calorías. Las personas a esta edad pueden perder un tres por ciento de fuerza muscular cada año. “Mantener esos músculos fuertes la ayuda a mantener el peso”, agrega.

Los años dorados

Aceptar su edad, sin preocupaciones.

Las personas mayores con frecuencia tienen otros problemas de salud que pueden aliviarse o agravarse según lo que coman. Muchas personas mayores toman medicamentos para disminuir el ácido estomacal, pero esto también disminuye la cantidad de calcio y magnesio en el cuerpo. Además de un metabolismo lento, Sheah también explica que, cuando envejecemos, la piel tiene menos capacidad para absorber vitamina D.

“Llevar una alimentación rica en fibras facilitará la digestión”, dice. “El tono muscular que pierde a medida que envejece también afecta los músculos en el tubo digestivo y esto puede provocar estreñimiento”.

Independientemente de su edad, llevar una alimentación saludable es fundamental para sentirse saludable. Y recuerde que sentirse viejo depende de cada uno.


Natasha Bright es escritora colaboradora de UMiami Health News. Sus artículos también aparecieron en los sitios web de Huffington Post y Scary Mommy.

Continue Reading