¿Puede el Estrés Cambiar tu Piel?

El estrés puede afectar negativamente la salud de la piel. Sin embargo, la relación entre el estado de nuestra piel y los niveles de estrés en la vida es más compleja de lo que parece.
“Hay muchas maneras de vincular el estrés y la piel. Existen varios tipos de estrés que pueden dañar la piel con el tiempo. Entre ellos, se encuentran el estrés metabólico y el estrés inducido por el estilo de vida”, afirma Alyx Cali Rosen Aigen, M.D. dermatóloga de University of Miami Health System.
Al mismo tiempo, señala que los problemas de piel pueden aumentar los niveles de estrés en una persona. Ha tratado a pacientes cuyas afecciones cutáneas les causaban una angustia significativa. Abordar estos problemas y mejorar su apariencia ayudó a reducir su nivel de estrés.
El estrés puede manifestarse de diversas formas como una reacción natural del cuerpo. Algunas respuestas son emocionales, otras físicas o conductuales.
La piel atraviesa diversas fases a medida que envejecemos
La calidad de la piel depende principalmente de la edad. Todos nos maravillamos de la suavidad aterciopelada de la piel de los niños pequeños. Durante la adolescencia, la pigmentación aumenta y suele aparecer el acné.
A medida que las personas envejecen, la piel se vuelve más delgada, y su apariencia puede cambiar debido a múltiples factores. Los cambios en las estructuras óseas subyacentes y los cambios hormonales a menudo dan lugar a líneas finas, arrugas y manchas oscuras. La exposición al sol y al viento también daña la piel, provocando sequedad, arrugas y decoloración.
El estrés puede afectar a nivel subcelular
Estos signos del envejecimiento pueden ser consecuencia del estrés oxidativo, un desequilibrio entre los radicales libres y los antioxidantes.
«Las células de la piel pueden dañarse por especies reactivas de oxígeno que se acumulan debido a la exposición a ciertos factores ambientales, como los rayos ultravioleta del sol o la contaminación, así como la inflamación en el cuerpo, entre otros mecanismos», explica la Dra. Rosen Aigen.
«Estas especies reactivas de oxígeno pueden dañar el ADN, dificultando su reparación; esto provoca un envejecimiento prematuro de la piel y la descomposición del colágeno y la elastina», agrega.
El colágeno es el principal componente de la piel, representando entre el 70 y el 80 % de su volumen.
Proporciona estructura, fuerza y suavidad a la piel.
Las especies reactivas de oxígeno pueden dañar el ADN y el ARN de las células, y en algunos casos, ocasionar la muerte celular. Pueden acumularse en la piel debido a la exposición al sol, otras formas de radiación, la contaminación o el tabaquismo.
Para mantener su piel lo más saludable y joven posible, limite la exposición a elementos que promuevan especies reactivas de oxígeno.
No ignores el dolor en la ATM.
La gente suele hablar de «ATM» como un problema de salud, pero «ATM» en realidad significa articulaciones temporomandibulares (ATM). Estas conectan la mandíbula inferior con el cráneo y permiten abrir la boca y masticar.
Los trastornos de la ATM afectan entre el 5 y el 10 % de la población en EE. UU., según informa el Instituto National Institute of Dental and Craniofacial Research. Estos trastornos incluyen el apretamiento de la mandíbula y el rechinamiento de los dientes. Estos patrones musculares o hábitos pueden afectar gravemente la apariencia de una persona, según la Dra. Rosen Aigen.
“Apretar los dientes y otros problemas de mandíbula pueden provocar artritis en la mandíbula. La artritis puede causar atrofia y pérdida ósea, lo que a su vez puede provocar un mayor descolgamiento. Si la mandíbula está débil, también puede afectar la estructura facial”, afirma.
El mentón puede retroceder un poco y parecer inclinarse hacia atrás desde debajo de la boca, lo que puede hacer que el rostro luzca más envejecido.
Si experimentas dolor en la mandíbula, problemas para masticar o escuchas ruidos al moverla, es recomendable acudir a un dentista. Si se detectan a tiempo, los trastornos de la ATM pueden aliviarse en gran medida mediante el uso de protectores bucales nocturnos que se colocan sobre los dientes para prevenir el rechinamiento y reducir el apretamiento.
“En estas situaciones, es fundamental acudir a un dentista profesional”, afirma el Dra. Rosen Aigen. Si te los recetan protectores, úsalos todas las noches.
Dedica tiempo regularmente a la relajación, lo que contribuirá a liberar la tensión en los músculos de la cara.
Tu rostro contiene docenas de músculos en cada lado, y el cuello tiene aproximadamente 20. Una búsqueda rápida en la internet ofrecerá una variedad de ejercicios que puedes realizar para aliviar la tensión facial. Si tensas de manera persistente los músculos de la cara debido a altos niveles de estrés, podría ser conveniente considerar un tratamiento profesional para la ansiedad.
Para reducir su nivel general de estrés:
- Incorpore actividades relajantes a su rutina.
- Tome baños o duchas calientes para ayudarle a dormir.
- Aprenda a meditar y/o utilizar ejercicios de respiración.
- Pruebe el yoga, el qi gong o el tai chi.
La mayoría de las personas encuentran relajante caminar al aire libre, observar las estaciones del año y los pájaros u otros animales. Este es un enfoque que la propia Dra. Rosen Aigen utiliza. “Para mí, la actividad física es una excelente manera de relajarme y brindarme un momento para reflexionar sobre algunos aspectos de mi vida como doctora y ahora madre de tres hijos”, afirma.
La ansiedad y el estrés pueden dar lugar a comportamientos que afectan la piel.
Las personas que se sienten habitualmente muy estresadas y ansiosas pueden adoptar hábitos que dañan directamente su piel. “ El acné , a menudo asociado con el estrés y la ansiedad, es una condición.
«Esto sucede cuando la piel se rasca, frota o se irrita repetidamente. Puede ocurrir incluso si no hay acné activo o poros dilatados y, en algunos casos, puede causar cicatrices notorias», explica la Dra. Rosen Aigen. Ella recuerda el caso de una adolescente que se había rascado la piel con fuerza, dejándola llena de marcas rojas.
«Frecuentemente, estos pacientes llegan al centro con marcas de acné y piden tratamiento para las cicatrices. Sin embargo, también es crucial tratar los factores psicológicos que están detrás del problema para mejorar realmente su condición y evitar que aparezcan más cicatrices», explica.
La tricotilomanía, una condición que hace que la persona sienta una fuerte necesidad de arrancarse el pelo, incluidas las cejas, también puede ser causada por el estrés. En muchos casos, es necesario un enfoque multidisciplinario. La Dra. Rosen Aigen trabaja junto a su colega, la Dra. Katlein Paola De Franca , quien se especializa en psicodermatología y dermatología integrativa.»
Los contaminantes estresan la piel y el cuerpo en general.
La piel puede absorber contaminantes dañinos directamente del aire. Además, la piel también puede verse afectada cuando inhalamos estos contaminantes o los consumimos a través de los alimentos, y luego la sangre los lleva hasta la piel. Estos son efectos ‘sistémicos’, ya que afectan a todo el cuerpo, como un sistema.
Reduce tu exposición a la contaminación del aire en interiores.
Environmental Protection Agency afirma que la mayoría de los estadounidenses pasan el 90% de su tiempo en espacios interiores .
La lista de contaminantes “cotidianos” es larga. Incluye herbicidas, pesticidas, humo de cigarrillo, pegamento, pinturas, masillas y detergentes. Otros contaminantes de interiores incluyen vapores de pinturas, solventes y productos industriales hechos de madera contrachapada o tableros prensados.
Incluso la ropa nueva suele contener sustancias químicas que pueden dañar la piel y otros órganos. Aunque la Unión Europea ha prohibido el uso de treinta sustancias químicas en la ropa , en Estados Unidos no existen normas sobre el uso de sustancias químicas en la ropa de adultos. ¿Qué hay que entender? Lavar toda la ropa, las toallas y las sábanas nuevas antes de usarlas.
Infórmese para elegir productos más seguros. Luego, ventile la alfombra o los muebles nuevos durante el mayor tiempo posible, idealmente al aire libre.
Fumar daña la piel de muchas maneras.
Este vicio produce arrugas prematuras, aumenta la melanina en la piel, lo que causa manchas oscuras y puede volver amarillos los dedos.
“Fumar tiene numerosos efectos nocivos para nuestra salud y nuestra piel. Es fundamental hacer todo lo posible por dejar de fumar y hay que tener en cuenta que la mayoría de las personas que lo hacen no lo hacen la primera vez que lo intentan”, afirma el Dr. Rosen Aigen.
Convierte tu casa en una zona libre de humo. Si otras personas fuman tabaco, marihuana o vaporizan, limítales a hacerlo al aire libre, lejos de puertas y ventanas.
Reduce tu exposición a la contaminación del aire exterior.
En los Estados Unidos y Europa, las regulaciones gubernamentales han reducido la contaminación del aire en los últimos 10 años. Sin embargo, con el cambio climático impulsando incendios forestales más grandes, la contaminación del aire exterior sigue siendo una amenaza para la piel y la salud en general.
Monitorea la contaminación del aire en tu área. Los informes meteorológicos y algunas aplicaciones son fuentes confiables para obtener información sobre la contaminación del aire exterior.
“Durante los períodos de mayor contaminación, evite hacer ejercicio al aire libre y, en su lugar, haga ejercicio en espacios cerrados. Y trate de evitar hacer ejercicio cerca de áreas con mucho tráfico”, recomienda el Dr. Rosen Aigen.
Conoce bien lo que hacen las cremas y lociones,
«Cuando se trata de la piel, muchas personas creen que una crema puede hacer milagros. Pueden probar seis o siete productos tópicos antes, o en lugar de, acudir a un dermatólogo certificado. Mientras tanto, todos estos productos pueden irritar la piel y empeorar la situación», advierte la Dra. Rosen Aigen.
No hay forma de evitar el estrés, sólo de gestionarlo.
Para lucir y sentirte lo mejor posible, encuentra algunas técnicas de manejo del estrés que funcionen para ti e intégralas a tu rutina diaria.
«Todos experimentamos estrés en nuestras vidas. Todos enfrentamos presiones, y no existen soluciones simples o rápidas para esos factores estresantes. Sin embargo, las elecciones de estilo de vida juegan un papel significativo», afirma la Dra. Rosen Aigen. Tomar buenas decisiones sobre dormir lo suficiente, hacer ejercicio y comer una dieta saludable puede reducir el estrés y mejorar considerablemente la salud de la piel.
Además de hacer ejercicio para manejar el estrés de su ajetreada vida, la Dra. Rosen Aigen pasa tiempo con su familia y amigos para relajarse. “Crear un sistema de apoyo de personas que realmente escuchen y ofrezcan apoyo es una de las mejores maneras de controlar el estrés”, afirma.
Prioriza pasar tiempo con las personas que te agradan y amas. Con ellas, seguro que fruncirás menos el ceño y sonreirás más, y eso te ayudará a sentirte bien por dentro y a verte mejor por fuera también.
Milly Dawson es colaboradora del servicio de noticias de UHealth.
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